Infidelidad

Al hablar de "infidelidad en la pareja" muchas son las sensaciones y conceptos que aparecen en el inconsciente colectivo como resultado de siglos de socialización. Sin embargo las ideas más comunes suelen ser las ligadas a la traición, la mentira, el engaño o la deslealtad. 

Básicamente hay infidelidad cuando uno de los miembros de la pareja (o ambos) rompe el compromiso de lealtad sentimental contraído de común acuerdo. La promesa de amar sólo y exclusivamente a determinada persona, es incumplida o traicionada. 

Una infidelidad no significa necesariamente ruptura, en muchos casos, la pareja logra superar el trance basándose en el perdón, promesas renovadas o nuevos compromisos. En otros casos la pareja se rompe indefectiblemente con el argumento de la imposibilidad de continuar confiando en la persona que faltó a sus votos o por temor a la repetición del comportamiento.

Estadísticas dicen que las mujeres engañan casi igual que los hombres, casi la mitad (una cifra similar a la masculina), la mayoría buscan más que sólo sexo.

Las mujeres son infieles tratando de compensar sentimientos, pasión, cariño, incluso aventura; lo que puede necesitarse si en un matrimonio o relación de noviazgo hay monotonía. Por otro lado, las mujeres también son mejores para ocultar una infidelidad, sobre todo porque aunque los hombres puedan sospechar, la simple idea de que les pongan el cuerno no los pone de buen humor, y si a esto se le suma el ego habitual, ellos mismos dan por sentado que no es posible.

Un estudio preguntaba a mujeres cuáles eran las causas de la infidelidad, dando como resultado que era por curiosidad, por oportunidad o por soledad en el matrimonio, entre otras cosas.

Asimismo, que los hombres con los que eran infieles son conocidos: amigos, profesores, instructores, doctores, dentistas, entre otros. Además, ellas pueden llegar a ser más fieles a los amantes que a la propia pareja.

Para ambos, hombre y mujer , el impulso sexual es una energía que debe ser extinguida o la persona no se sentirá cómoda físicamente y mentalmente, porque puede ser un motivo para una riña buscando cualquier motivo insignificante, o aumentar algún existente.

El hombre no es monógamo

En El origen de la familia, Engels relata“Claramente cómo surge la monogamia como acondicionamiento social.”

Existen muchas sociedades en el mundo donde lamonogamia es una extraña sofisticación mientras que lo natural es lo contrario. 


En algunas sociedades es costumbre la práctica de prestar esposas, es en esa forma como la cooperación entre hombres esta unida bajo un lazo sexual.


En otras sociedades los hombres que pertenecen a un mismo clan pueden tener relaciones con las esposas de cada uno de los miembros del clan excepto si la mujer está embarazada.

En ese caso ella solo tendrá relaciones sexuales con su marido.
La monogamia ha puesto a la mujer en el lugar de objeto sexual y prohibido y por otra parte, ha dado lugar a la invención de la prostituta. no negamos que se puede vivir eternamente en la monogamia, pero esto parece más costumbre del pasado.

En la actualidad el uso del mecanismo social me-caso-me-divorcio funciona en tal forma que un hombre que ha pasado por el varias veces, puede decir que ha tenido un harem, siempre una por vez.

La mujer, que tiene la misma facilidad que el hombre para divorciarse, puede decirse que vivió en la poliandria, pero dándose tiempo con cada uno. 
Es la clase de moral occidental que no permite, ni siquiera la creencia, de que se puede amar y ser sexualmente atraído por más de un miembro del sexo opuesto o del mismo sexo al mismo tiempo.

La monogamia es el campo de cultivo de los celos, el matrimonio ortodoxo entiende que los celos es algo natural dentro de la relación y no falta pareja que en algún momento quieran darse un "poquito de celos" para demostrarse que se aman.
Sin embargo aunque sea poquito o mucho la cantidad de celos que se quieran dar, se trata de un sentimiento artificial y destructivo.