Como reconciliar

Muchas parejas hallan que es útil un tiempo específico para discutir temas o problemas. En la primera sesión es probable que sea mejor traer a colación sólo uno o dos temas, no sea que usted abrume a su cónyuge y comience una pelea interminable e improductiva.

A continuación hay sugerencias generales para los encuentros.

1) Determine un tiempo específico para sus sesiones de reconciliación, un momento que sea tranquilo y en que usted pueda hablar con libertad. Algunas parejas consideran útil ir a cenar afuera y hablar sobre las cosas en alguna parte retirada del restaurante.

2) No traiga a colación incidentes molestos cada vez que acontezcan durante la semana; en cambio, prepare una lista de temas a discutir durante la sesión especial.

3) Convengan en el programa al comienzo de la sesión, haciendo una lista de problemas o peticiones. De este modo, no tomará por sorpresa a su cónyuge en la sesión, o no olvidará de traer a colación cualquier tema para discutir.

4) Túrnense y discutan un problema cada vez. Cuando sea su turno, exponga el problema con claridad para que su pareja lo entienda. Si es necesario, repítalo.

5) Sugiera algunas soluciones posibles al problema que expone.

6) Sugiera ideas con su cónyuge para otras soluciones potenciales. Trate de presentar cuantas soluciones sean posibles y luego haga un análisis del precio que éstas suponen. Por ejemplo, contratar una ayuda para los quehaceres domésticos aliviará algo el peso para un matrimonio que trabaja, pero el costo puede producir un déficit monetario y crear más tensión.

Es posible que algunas sugerencias produzcan soluciones útiles a la larga pero no a la corta, y viceversa. Por ejemplo, mudarse a una casa más grande puede ser una meta práctica a largo plazo cuando el ingreso familiar se incremente de modo substancial, pero es posible que no sea práctico en un futuro próximo.